Me econtraba sentada en la sala de mi casa con varias personas que sentia conocidas pero sin ver sus rostros nítidamente. De pronto mi ex marido abre la puerta principal e ingresan tres duendes de navidad adultos sonrientes caminando muy rápido como robots uno detras del otro pasando hasta los dormitorios y luego salieron de la casa del mismo modo. Senti temor al ver que eso no era real. Luego pase a otro escenario con como con un mar de aguas oscuras con grandes olas y situaciones angustiantes que no recuerdo con precisión; de inmediato pase a un lugar muy soleado hermoso con árboles al fondo, todo colorido, y una piscina al centro con aguas muy cristalinas, piscina como de marmol no liso sino con acabados irregulares. Yo sentada en medio de la piscina sobre una especie de roca del mismo marmol y con mi pie derecho desnudo roce a uno de los muchos pececillos negros que nadaban agrupados, eran peces pequeños, mientras mi hija mayor puesta en cuclichas al borde de la piscina los miraba con mirada desconcertada- asombrada . Luego me vi parada dentro de la piscina , con el agua hasta las rodillas y fui a señalarle a mi hija unos pececillos que se encontraban enquistados entre las ranuras de un lado de la piscina, fue cuando uno de ellos se prendio de mi dedo indice derecho. Lo jale con mucha fuerza para desprenderme de él. Inmediatamente pase nuevamente al escenario de la sala de mi casa con las mismas personas a las que no veia el rostro con nitidez , me levante y empece a despedirme de todos con un beso en la mejilla y al llegar al último, éste levanto el rostro y fue el unico que vi nitidamente y era el esposo de mi segunda hija con el que hacia dos años no veia por haber tenedio una fuerte confrontación. Desperté con una sensación espantosa de angustia, miedo, etc. sentí como si me hubiese trasladado al mundo de los muertos. Ha pasado casi un año y el sueño lo recuerdo nitido