Hoy soñé que estaba en mi cuarto, en la casa donde vivíamos antes. Mi hermano mayor estaba sentado en mi cama y me dice mira, mientras apunta con su dedo índice hacia el techo. Voltee y vi que había una pequeña gotera (en ese techo era común que cuando llovía muy fuerte se encharcara el agua y goteara). El agua caía en el piso. La gotera rápidamente empezó a crecer hasta volverse un hilo de agua. Le dije a mi hermano que volvía en un momento y rápidamente salí al patio para subirme a la azotea. Ya en el techo vi que efectivamente había un charco de agua limpia de lluvia, pero ya no estaba lloviendo. Antes de empezar a barrerla me puse a limpiar el desagüe, ya que normalmente se tapaba con hojas polvo y tierra. A parte de esa basura también vi papales mojados y unos pastelitos de la burger king que vienen en presentación de tres, estaban abiertos y le faltaba un pastelito. La envoltura estaba hecha de papel celofán transparente con diseño en azul, blanco y amarillo. Aunque ese producto no existe; en el sueño yo sabía que eran dulces y poco nutritivos. Pensé que algún niño o un albañil los había dejado ahí para comerlos después y se les habían olvidado. Estaba mirando el empaque de pastelitos cuando sentí un pequeño temblor. Lo cual me tomó por sorpresa (donde yo vivo sólo una vez he sentido un pequeño sismo) Voltee a ver el charco de agua y vi como se hacían pequeñas olas y otra vez volvió a temblar y el agua del charco caminó hacia mi, volvió a temblar nuevamente y más agua siguió llegando. El agua estaba limpia pero se ensuciaba al contacto con la basura del techo. Volvió a temblar de nuevo y más agua se dirigía hacia mi en pequeñas olas. No alcanzaba a ver de donde venía tanta agua, pero antes de que el agua pudiera tocarme me subí a un nivel superior del techo. Los temblores se hicieron más seguidos, hasta que fueron repetitivos juntos con un ruido que venía del cielo. Vi una sombra gigante que caminaba rápidamente hacia mí cubriéndolo todo. Voltee hacia el cielo y a primera instancia y a contra sol me pareció ver un gran platillo metálico. Conforme fue avanzando puede ver que era un helicóptero de una clase que yo no conocía. Era muy grande de cuerpo parecido a una ballena aplastada. Y no era uno sino muchos, algunos iguales al que vi primero otros diferentes y que si reconocí como helicópteros de carga y helicópteros de transporte de personal. Eran tantos que hacían temblar la tierra a su paso. Iban sujetos a gruesos cables metálicos y para mi mayor sorpresa estaban transportando un enorme barco trasatlántico de fondo azul y cuerpo blanco a unos 250 metros del suelo. El barco y los helicópteros pasaron lentamente haciendo temblar el suelo y ahogando todo sonido con el ruido de sus rotores. Yo me quedé estupefacto viéndolos alejarse hacia el horizonte. En eso estaba cuándo me despertaron.
Definitivamente fue un sueño raro y perturbador.